Mucho se está hablando en los últimos meses de las facturas que el anterior equipo de gobierno socialista cargó en las cuentas del ayuntamiento por cuestiones de gastos de representación. Cuando un gobierno no ha hecho nada en 4 años y se ha perdido el tiempo y el dinero de todos hay que buscar fantasmas en el pasado y continuar con la “caza de brujas” que se inició en la campaña electoral del año 2.007 para intentar justificar lo injustificable y continuar buscando culpables y responsables en el pasado.
Todas y cada una de ellas tienen su justificación y explicación en función del momento y la situación en las que fueron generadas. Citaremos como ejemplo una que aparece en el último boletín del Partido Popular correspondiente a las noches del 7 y 8 de agosto de 2005 en la cual aparecen bocadillos, refrescos, aguas y 3 paquetes de tabaco. Esas facturas corresponden al fin de semana del trágico incendio en Valdemarín y esa fue la cena de los numerosos vecinos de la aldea y del pueblo que fueron a ayudar en la extinción del fuego y que pasaron la noche en vela colaborando para que el desastre no fuera mayor; desde el PSOE consideramos que utilizar una noche tan negra como esa como arma arrojadiza en la campaña electoral traspasa cualquier nivel de respeto político.
Sin embargo, en el boletín del Partido Popular no dicen nada de las facturas que durante esta legislatura se están generando en conceptos de gastos de representación. Nosotros traemos aquí algunas de ellas para que la actual corporación que nos gobierna, nos explique quien fuma MALBORO o bebe PUCHEROS y BRUGAL-COLA a costa de las arcas del ayuntamiento; seguro que en este caso el Partido Popular dirá que difamamos o que injuriamos; pero las facturas están ahí y lo cierto es que esas facturas van dirigidas y tienen registro de entrada en el ayuntamiento de Orcera y alguien durante el verano de 2.010 estuvo bebiendo y fumando a costa de todos los orcereños.
2 comentarios:
Le pido que por favor no me interrumpa, que estoy en el uso de la palabra.
Señor Gregorio: Le recuerdo que estoy en el uso de la palabra. Por favor no me interrumpa.
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